12 mar 2011

(re)Vivir

No pienso llorar hasta que no esté en paz conmigo misma.
Quiero odiar, gritar, saltar, patalear, pero llorar no. De momento.
Es decir, no soy una hija de puta insensible que no lloró, pero sé que me tragué las lágrimas lo máximo que pude. Y que las que salieron, fueron en medio de crisis nerviosas o situaciones demasiado extremas en las que si aguantaba, me desmayaba de un momento a otro.
Quiero darme un respiro, disfrutar de la vida, hasta el final, siempre a tope.
Prometo que el próximo viernes, comenzará (otra vez más) mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario